Las cicatrices son el resultado del proceso natural de reparación de la piel tras una lesión, inflamación o intervención. Pueden ser planas, hundidas o elevadas, y su apariencia varía según el tipo de piel, la profundidad del daño y los cuidados recibidos durante la fase de curación. Aunque no siempre pueden eliminarse por completo, es posible mejorar visiblemente su textura, color y relieve con una rutina adecuada.

Los productos coreanos dirigidos al cuidado de cicatrices incluyen activos regeneradores, despigmentantes y suavizantes como la centella asiática, la niacinamida y el ácido madecásico. Estos ingredientes promueven la renovación celular, mejoran la elasticidad y reducen la pigmentación residual.

A continuación, te ofrecemos una selección de tratamientos coreanos especialmente formulados para minimizar el aspecto de las cicatrices, suavizar la textura de la piel y favorecer un tono más uniforme y saludable.